Daniel Corba tiene 81 años, actualmente vive en el Barrio Güemes y a través de una entrevista con Luis Godoy compartió la historia de porqué poseé y cómo conservó la cúpula del reloj que próximamente volverá a instalarse en la ciudad.
Como trabajador ferroviario vivía en la casa ubicada en Independencia y Humberto Primo, a pocos metros del reloj, casi cuatro décadas atrás el gobierno municipal decide retirarlo y llevarlo como material de relleno al playón del Puerto dónde personal de Prefectura Naval lo rescata y lo instala en la Plazoleta del Destacamento. Según contó Daniel una madrugada "encuentro un objeto en la cuneta, lo recogí y me dí cuenta que era la cúpula del reloj que habían sacado..decidí conservarla por todo lo que significaba ese lugar...mis hijos se reunían a charlar con sus amigos..a comer semillitas!!..cada vez que entraba o salía de la casa miraba la hora, o le decía a los chicos que salgan para fijarse que hora era....por eso lo guardé como una reliquia..hubo algo en mí que me llevó a conservarla y hoy estoy contentísimo porque va a volver al lugar de dónde fue sacada".
Durante 14 años la tuvo en su casa de Arroyo Seco, después es llevada a otra vivienda en General Lagos dónde estuvo 24 años hasta que hace una semana atrás cuando supo del proyecto del Concejal Paolini de instalar nuevamente el histórico reloj, le pide a un familiar que le traiga la cúpula, la cuál ya fue restaurada y está a disposición para ser colocada en su lugar original después de 38 años.
Daniel que además de ferroviario, fue mozo en ASAC y en Unión y realizó durante 14 años el mantenimiento en el Sanatorio Maiorano, deja un pedido a todos los gobiernos municipales sin importar el partido político, que se preserven y cuiden los lugares históricos, conservarlos como patrimonios de la ciudad porque cada uno guarda innumerables historias de vidas.