Los efectivos de Gendarmería y de la policía de la provincia oficiaron como custodios, mientras que el derribo estuvo a cargo del personal de Seguridad Comunitaria de la Municipalidad.
La rudimentaria puerta de entrada dejaba ver el agujero provocado por un balazo. Osvaldo Lafatige, secretario de Seguridad Comunitaria municipal, comenzaron las tareas de derribo en el búnker de 27 de febrero y Circunvalación y que continuaban "con otro que está a siete u ocho cuadras de aquí, y seguiremos con otros".
"La idea es que en el mismo sitio donde estaba funcionando el búnker, no funcione más. Esto no quiere decir que se van a eliminar los puestos de venta", reconoció el funcionario del municipio. Y anticipó que "la idea es reaciondicionarlos para que sirvan como espacios para distintas tareas sociales".
Lafatigue habló de los inconvenientes que se pueden presentar en la demolición de estas construcciones: "Si no hay nadie viviendo y el búnker está en un terreno fiscal, no hay problemas. Pero cuando está en un terreno privado, no se puede tocar".
Fuente: Rosario3
Informe Carlos Márquez