18/06/14
El "berretín" de las cosas idas... Arroyo Seco Rowing Club
Un núcleo de amantes del remo, por iniciativa del Sr. ROMULO COPELLO, EL 20 DE OCTUBRE DE 1918, funda a "Orillas del Paraná" el "ARROYO SECO ROWING CLUB"
Gracias al esfuerzo de su comunidad, Arroyo Seco se fue nutriendo de progreso y de cultura. Ya a fines del siglo pasado y comienzos del nuevo siglo, el pueblo fue evolucionando dando lugar a la creación de Instituciones, muchas de las cuales se han ido preservando.
Con el correr de los años y dejando de lado sus intereses personales, muchos hombres y mujeres, en varios casos con la participación de sus familias; dedicaron tiempos de esfuerzo para contribuir al engrandecimiento de ellas. Lo hicieron, como corresponde decir "ad honorem".
En ocasiones, la comunidad ha hecho el reconocimiento de ellos, pero es cierto que también son muchos aquellos a los que por olvido, indiferencia, o tal vez porque su trabajo fue anónimo, se los ha omitido de tal recordación. Sea este, entonces, el pequeño homenaje que a través de nuestra página, rendimos a todos los que durante dédacas permitieron la existencia hoy en ARROYO SECO de estas Instituciones. En este número, recordaremos a un viejo Club creado a principios de siglo...
Un núcleo de amantes del remo, por iniciativa del Sr. ROMULO COPELLO, EL 20 DE OCTUBRE DE 1918, funda a "Orillas del Paraná" el "ARROYO SECO ROWING CLUB", quedando integrada la primera comisión directiva con cinco miembros: Presidente: ROMULO COPELLO; Tesorero: HUMBERTO PUIGSUBIRA; Secretario: EMILIO PASCUAL; Vocales: JOSE TAGLIARI y JOSE OTERO. El objetivo estaba bien definido: "Formar un Club de Regatas cuyo fin es de proporcionar a sus miembros la oportunidad de ejercitarse en el uso y manejo de los botes, tratando por todos los medios de desarrollar la afición al remo, navegación a vela, natación y otros deportes..."
Y fue así entonces, que estos directivos, con la compañía de jóvenes entusiastas, deciden comprar los 5 primeros botes al Rowing Club de Rosario. Al mismo tiempo, se inicia la construcción de un galpón de 5 por 10 metros. A principios del 30 se construyó un segundo galpón.
Un pequeño sendero que bajaba en forma de caracol, era el único acceso que había en los primeros años para acceder al Club.
La construcción de la bajada que data de 1928, tuvo una significativa importancia, habiéndose estrenado este flamante acceso, con el descenso de un Ford T, propiedad de Don Alfredo Nasurdi.
El terreno que actualmente se utiliza arriba como Playa de Estacionamiento fue donado por el "Tiro Federal". Una plantación de plátanos realizada en 1920, aún existe y son los árboles que hoy brindan sombra al patio del Club.
Los aficionados a la paleta, vieron cristalizado su anhelo cuando entre los años 1937 y 1938 se construyó el frontón de pelota paleta.
El extraordinario volumen de agua traído por el Río Paraná y sus efectos devastadores fue siempre uno de los problemas más graves que tuvieron que afrontar sus Directivos. En los primeros años (1919) se evitaron con la construcción precaria de un murallón de madera. Más tarde, en los años 1943 y 1944 se construye uno de piedra rellenado de tierra, y en 1954 se pudo concretar una obra importante que fue el murallón de cemento armado. Y fue así que con la colaboración del Cuerpo de Zapadores Pontoneros de San Nicolás, se ensanchó la bajada, dinamitándola y facilitando con las piedras el relleno del patio y las tareas en el murallón.
Sabemos que sin estas obras el Club no hubiese podido existir. La construcción y ampliación de murallones, no obstante se continuaron realizando en los años siguientes.
Las sucesivas Comisiones Directivas a través de los años fueron enriqueciendo las Instalaciones del Club; en la década del 60 se inaugura la Confitería del Club, la Casa del bufetero, se construye la playa de arena y el tapial de contención del agua que desciende de la barranca, como también la Obra de Vestuarios y de Baños, y se colocan mesas de granito en el patio.
También es bueno recordar que en 1968 en oportunidad de cumplir las Bodas de Oro, se realizaron los festejos, editándose una Revista de los 50 años de vida, y además se eligió la Reina del Rowing Club, designándose a la Sta. Graciela Boselli.
La pasión regatera de la institución se observa a través de todos los años, algunas de mayor auge y otras con menor entusiasmo. Si tuviéramos que reseñar la actividad deportiva con los innumerables Certámenes de Navegación a Vela y los numerosos aficionados que participaron de ella, sería imposible en esta página, por la cantidad de años de vida de la entidad. Lo mismo se puede apreciar con la natación y la práctica del remo. No dudamos poder hacerlo en un futuro.
Un suceso muy importante aconteció el 23 de Junio de 1932, cuando el "más grande de los navegantes de todos los tiempos" visitó el Rowing Club. Hablamos de Vito Dumas quién diera la vuelta alrededor del mundo. Su presencia motivó una serie de agasajos y se lo distinguió como Socio Honorario.
De los cuidadores y bufeteros podemos mencionar a José Costa, Bartolo Centurión, José Tognoli, Mansueto Landucci, Juan Purco, Juan Calviño y Francisco Garfagnoli hasta fines del 60.
En 1931 se organizan las "Fiestas Venecianas", junto con el Club A. Unión, y por años se festejó el "Tradicional Baile de la Ribera".
Lugar de reuniones familiares, el asado en la parrilla, el sol en la arena y el chapuzón en el agua, el paseo en Bote o en Vela; el Rowing Club fue muchas veces el lugar elegido para festejos y celebraciones. Desde 1980 se practica el deporte del WINDSURF.
El Club cuenta con un muelle de pescadores. Todos los años, a fines del mes de Noviembre se realiza la FIESTA PROVINCIAL
DEL ARMADO, habiéndose declarado de Interés Municipal y Provincial.
El trayecto que separa la población de Arroyo Seco de su ribera es de una distancia considerable , el largo camino de tierra, a veces polvoriento; fangoso en otros casos ; hacía incómoda e intransitable la travesía hasta el Rowing Club. Con los años, éste fue pavimentado. Luego, tambíen aquella bajada de toscas, gracias a la colaboración y el esfuerzo de su gente, se logró asfaltar.
Es por eso que vienen a nuestro recuerdo, las calurosas tardes de verano, de la Década del 60; y el viaje rumbo al Rowing en el "DIAMONDT MODELO 40", aquél pequeño Colectivo, conducido por el paciente y gentil MIGUELITO POTEPAN, y la polvareda que levantaba a su paso, para dejarnos por fin en la puerta del Club. En definitiva somos y seremos, estos encuentros cotidianos con historias de Clubes, de personas, de vida; y el reflejo y el esplendor que de ellas emanan, para hacernos y sentirnos más humanos.
Colaboración Especial de: Gustavo Cipettini
Agradecimiento: Roberto Marcatelli (Presidente del A.S.R.C.)
* Este material fue publicado originalmente en TEMAS & NEGOCIOS .