18/10/15

Misterio alrededor del crimen de los hermanos en Rosario

 

En la escena se encontraron ocho vainas servidas calibre 9 milímetros pero la puerta de ingreso a la vivienda no tenía signos de haber sido forzada. Buscan el móvil.

 

 

El misterio detrás del crimen de los hermanos Agustina y Javier Ponisio sigue desvelando a la policía. Por el momento, los fiscales a cargo de la investigación se mantienen precavidos y no descartan ninguna hipótesis, más allá de que los indicios apuntan a que la joven de 28 años y a su hermano de 25 los habría matado alguien conocido. Las amigas de Agustina revelaron que hace poco que estaba saliendo con un chofer de una línea de colectivos.

Los investigadores estiman que el doble homicida debía conocer bien los movimientos de la casa de los Ponisio, ubicada en Castro Barros al 5500 del barrio Saladillo, en la zona sur de Rosario, porque Mónica Pesce, madre de las víctimas, salió hacía el gimnasio pasadas las 8 y recién volvió a las 9:30, cuando descubrió el doble crimen. En tanto, Horacio, el padre de los hermanos, estaba de viaje en Ushuaia desde el lunes.

Según consignó Tiempo Argentino, durante esa hora y media que la madre estuvo fuera, el asesino aprovechó para llevar a cabo el crimen.

La primera en ser asesinada habría sido Agustina. La joven yacía en el comedor con dos tiros en la cabeza. Tenía puesto su uniforme del Sanatorio del Niño, donde trabajaba, y en la mesa aún estaba el mate preparado.

Se cree que Javier, que estaba en la planta alta de la casa, bajó al escuchar las detonaciones y fue sorprendido por el homicida, que lo ejecutó de tres tiros en la cabeza y los brazos. Que la chica fuera asesinada primero hace suponer que el asesino fue a matarla a ella y luego disparó contra el hermano para cubrirse. 

En este sentido, varias amigas de la joven afirmaron al diario La Capital que ella estaba viéndose desde hace unos 15 días con un chofer de la línea 142 de colectivos, aunque por el momento no era nada serio. 

Un vecino de los Ponisio que escuchó los disparos declaró que vio salir de la vivienda a un joven de "barbita", que caminó hacia el cruce de Castro Barros e Hilarión de la Quintana y una vez allí se subió a un auto.


Fuente: Info/news

 

 

 

UCSF

 

 

 

 

 

 

 

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