13/12/12
Procesaron a un ex jefe policial por encubrir las actividades de un narco
El comisario José Luis Baella, quien se desempeñó como jefe de la Sección Inteligencia de la ex Drogas Peligrosas, fue procesado por la Justicia federal.
El comisario José Luis Baella, quien hasta junio se desempeñó como jefe de la Sección Inteligencia de la ex Drogas Peligrosas, fue procesado por la Justicia federal por "encubrimiento agravado, incumplimiento de los deberes de funcionario público y partícipe necesario de coacciones" en perjuicio de la dirigente de una ONG que denunció complicidad de jefes policiales con un narco santafesino. El fallo del juez Francisco Miño confirmó la libertad provisional del imputado y le trabó embargo por 5 mil pesos.
La investigación que deparó en el procesamiento de Baella se inició el 3 de marzo pasado cuando investigadores de Asuntos Internos de la policía realizaban tareas de vigilancia sobre una casa de Colastiné Norte en la que Daniel Francisco El tuerto Mendoza había montado una cocina de cocaína. Mientras los pesquisas observaban el lugar, hasta allí llegó un Chevrolet Corsa color champagne con vidrios polarizados y patente HER858 al que subió el sospechoso narco y quince minutos después, volvió a dejarlo en su casa.
La investigación avanzó y se confirmó que ese auto pertenece a la Sección Inteligencia Zona Centro de la ex Drogas Peligrosas de la cual Baella era subjefe. Al allanar esa dependencia, Asuntos Internos constató en el libro de guardia que aquel 3 de marzo a las 21, se registró la salida del "Cro. Baella J.L." a bordo del Chevrolet Corsa champagne al que poco después subió Mendoza. Además, las intervenciones telefónicas detectaron que el comisario José Luis Baella estuvo en la zona del domicilio de Mendoza ese día y en el horario mencionado.
Pocos meses más tarde, y cuando ya Baella había sido derivado de Drogas a la Unidad Regional XV, un allanamianeto en la casa que El tuerto arrendaba en Colastiné descubrió una cocina de cocaína en la que se secuestró pasta base, precursores químicos, balanzas electrónicas y otros elementos vinculados a la fabricación de la droga.
El video.
Para los investigadores judiciales no caben dudas de que Baella conocía la relación de El tuerto Mendoza con las drogas. Es que un año antes, el 3 de marzo de 2011, el comisario rubricó ante la Justicia federal un parte informativo que daba cuenta de "la presunta comercialización de estupefacientes de parte de Daniel Francisco Mendoza bajo la modalidad de delivery". De aquella fecha también data el video que habría ordenado filmar Baella para registrar el momento en que El tuerto se reunió con Norma Castaño en la casa de la mujer que es referente de Madres Solidarias, la ONG dedicada a denunciar el narcotráfico y la protección oficial a esa actividad.
Ese video se filmó tras una llamativa persecución de Baella a Mendoza desde el macrocentro santafesino hasta la casa de Castaño, imágenes luego subidas a Youtube bajo el título "Madre del dolor tranza con narco". El fiscal Rodríguez ahora espera la respuesta de Google para que informe cuándo, desde dónde y que equipo de computación publicó ese video.
La investigación del fiscal determinó además que el video fue registrado por un oficial de apellido Otaduy que reside frente a la casa de Castaño y contaba en ese momento con una filmadora en su poder. En ese sentido, el fallo sostiene que "fue así que tras recibir el llamado de Baella (quien pretendía evitar ser descubierto por Mendoza, Otaduy) captó el encuentro".
No sólo el fiscal y el juez coinciden en que "fue un golpe de suerte" que Otaduy esté en su casa al momento del encuentro entre Mendoza y Castaño, sino que tuviera una filmadora. Pero esa suerte comienza a ponerse en duda a partir de las demás constataciones de la investigación que determinaron que de ningún modo el seguimiento de Baella a Mendoza (tanto por la distancia como por su supuesto derrotero) pudo realizarse sin que lo haya advertido.
"Un análisis global de como se sucedieron los hechos expuestos y de los elementos probatorios colectados en autos me permiten inferir, con el grado de probabilidad requerido en esta instancia, que el comisario Baella, con la colaboración de otros empleados de la fuerza, habría generado esta suerte de investigación al sólo efecto de gestar un encuentro entre Mendoza y Norma Castaño, para que luego Mendoza le exija el retiro de las denuncias que la nombrada había formulado en contra del personal policial especializado en drogas, lo que también le habría permitido continuar con la actividad delictiva que venía desplegando. Encuentro que, casualmente, se originó luego de un seguimiento espontáneo o inadvertido, como si fuera obra de la casualidad", dice la resolución.
Finalmente quien extorsionó a Castaño con hacer público el video para desacreditarla (tal como se hizo) fue el propio Mendoza, deduce la investigación. "El video fue filmado por la policía y para que estuviera en poder del narco no pudo sino mediar una entrega pactada por los uniformados con éste. Es decir, entre Baella y Mendoza para, efectivamente, buscar desacreditar las denuncias de Castaño", quien además había estado en pareja con un efectivo de la ex Drogas Peligrosas que fue echado de la fuerza y era primo segundo de Mendoza.
Para el fiscal Walter Rodríguez, "Castaño fue víctima de una trampa armada por la policía para lograr su silencio o retractación de las denuncias promovidas respecto de agentes de Drogas Peligrosas que estarían en connivencia con personas dedicadas al tráfico de drogas".
Fuente. Diario La Capital