24/05/13

Boca y Newells no se sacaron diferencias

 

En el partido de ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores, los equipos argentinos igualaron en cero. La definición será el miércoles en Rosario

 

 

Boca saltó al terreno mentalizado en un claro objetivo a corto plazo: ganar. Lo mismo hizo veinte días atrás, cuando recibió a Corinthians con la presión de saberse inferior desde el juego, pero capaz desde lo mental siempre y cuando no escatimara en el esfuerzo. Así lo entendieron tanto el Virrey como los jugadores y por eso desde el primer minuto estuvieron todos los que Bianchi consideró, a pesar de dolencias o fatigas.

En la previa, sin tener en cuenta el plus que el Xeneize siempre entrega en los partidos de Copa Libertadores, más en series mano mano, la balanza se inclinaba para el lado de Newells, signado como uno de los mejores de la Argentina, pero el elenco de Gerardo Martino no logró ejecutar su estilo característico. Los de la Ribera se lo impidieron.

El dueño de casa, con un Erviti como bandera y Somoza haciendo de sostén del mediocampo, le sacó la pelota a los rosarinos hasta desorientarlos. Riquelme aprovechó esa tenencia para hacer ancha la cancha, generalmente arrancando las acciones del medio hacia la izquierda y cambiando de frente a las espaldas de un deslucido Milton Casco.

El 0-0 se sostenía solamente gracias a algún buen quite del siempre rendidor Gringo Heinze más la impericia del anfitrión para definir. Al menos dos veces Blandi tuvo la posibilidad de abrir el marcador: en ambos casos desvió su remate. En cuanto al ataque los visitantes, era notable la dependencia del ingenio de un Nacho Scocco bien contenido por los centrales, Maximiliano Rodríguez realizó cuanto estuvo a su alcance, resultando escaso o casi nulo.

En el segundo tiempo la historia varió un poco. Boca mermó en su intensidad y permitió que los de Santa Fe, ya no tan asfixiados, jugaran más cerca del arco defendido por Agustín Orión, aunque sin generarle demasiado peligro a quien suele ser convocado por Alejandro Sabella para la Selección Argentina. La única vez que el ex Estudiantes y San Lorenzo resultó a los 20 minutos, ante una buena volea de Scocco.

Ni siquiera las intenciones nacidas en los bancos de suplentes se vieron reflejadas en el terreno. Tanto Bianchi como Martino hicieron ingresar a un extremo (Tonso y Laucha Acosta) para vulnerar a unos marcadores de punta de noche olvidable, sobretodo Clemente Rodríguez y Milton Casco. Dentro del terreno esta idea no se entendió y los futbolistas mantuvieron la intención de penetrar por el poblado centro del terreno. Sólo quedó tiempo para la expulsión de Guillermo Burdisso, amonestado en la última jugada por agarrarse dentro del área junto con Vergini, defensor de Newells.

El empate deja la llave de cuartos de final complemente abierta para la definición del próximo miércoles, en Rosario. El estadio Marcelo Bielsa se vestirá de gala para vivir lo que de seguro será una gran tarde- noche de copas (será a las 19.30), donde alguien celebrará el pase a las semifinales del torneo continental más importante de Sudamérica.

Antes, el domingo, desde las 21.30, estos dos equipos volverán a cruzarse, pero por el torneo Final. Se medirán, se estudiarán, y sacarán propias  conclusiones desde la experiencia. Se verá. En seis días habrá un ganador, sólo queda esperar para saberlo.

Fuente: El Gráfico


 

 

 

 

 

 

 

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