13/12/13
Tiempo de “fiestas”, tiempo para pensar.
Para muchos la Navidad y el comienzo de un año pueden significar algo profundo, no obstante, las Fiestas tradicionales pueden estar envueltas en excesos y desbordes en las comidas, en las bebidas, así como en la preparación social y personal.
Detrás de los villancicos, las reuniones y las fiestas acechan los peligros de una época dada a los excesos. Así, las comilonas y las intoxicaciones etílicas son habituales en las celebraciones navideñas.
"Lo fundamental es evitar los excesos en lo que a cantidad se refiere y controlar mucho el consumo de alcohol", indica Salvador Tranche, secretario de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria.
Si se cumplen estas recomendaciones, "no hay ningún alimento prohibido", asegura.
http://misegundointentodeblog.blogspot.com.ar/2012/11/excesos-en-las-celebraciones-navidenas.html
Para otros significa estar alejados del bullicio, sentirse solos y deprimidos, y otro sector, al tener que trabajar en estas fechas, probablemente estén molestos o angustiados porque se encontrarán alejados de sus familiares y amigos.
Aun trabajando o apartados de sus seres queridos, pueden sentir la compañía de buenos pensamientos. Pensamientos que impartan generosidad y amor donde sea que se encuentren.
Amar es dar, sin esperar nada a cambio. El amor verdadero se olvida de sí mismo.
Una Navidad que rescate valores espirituales.
Cuando se descubre el secreto de la felicidad, ésta puede estar basada en un gozo interno, incapaz de malograr ningún momento.
Comparto una investigación interesante respecto a la búsqueda de la felicidad:
Científicos descubren el secreto de la felicidad tras 72 años de investigaciones.
• El secreto: educación, relaciones sociales y familiares, vida sana, poco alcohol y sin tabaco.
• Valores como el dinero, la gloria o la belleza no garantizan la felicidad.
La felicidad no está ni en un perfume ni en un coche de gran cilindrada. Según investigadores de la Universidad de Harvard, la fórmula de la felicidad pertenece a las personas que han recibido educación, mantienen vínculos familiares y sociales fuertes, y llevan una vida sana, sin tabaco ni excesos con el alcohol.
El estudio también revela que la gente famosa, influyente y adinerada tiene más posibilidades de deprimirse que los menos prósperos, porque se sienten menos satisfechos con la vida.
"Son más felices aquellas personas que no han perseguido ambiciosos objetivos profesionales pero tienen fuertes vínculos sociales: una buena familia y amigos de confianza", concluye el estudio.
http://www.rtve.es/noticias/20090604/cientificos-descubren-secreto-felicidad-tras-72-anos-investigaciones/279686.shtml
Preparémonos para estas Fiestas, con la mejor gala: espiritualizar el pensamiento.
Un estado mental balanceado y equilibrado no sufrirá ninguna pérdida, ningún desborde.
Es el aniversario del nacimiento de un amigo como es Jesús, y como tal, podemos ofrecerle el mejor regalo: un corazón agradecido, un corazón colmado de luz y paz, unidad y respeto.
Cada uno sabe cómo transformar estos días en una real y auténtica conmemoración.
Elizabeth Santángelo
Integra el Comité de la Ciencia Cristiana, en Argentina.
Contacto: Argentina@compub.org